Lo bueno y lo malo de una clase grupal
Como ha cambiando el mundo del fitness los últimos 20 años. El concepto de la clase grupal, en el mundo de los gimnasios tradicionales, era bien específico. Veías clases de spinning por montones y una serie de otra alternativas que parecían sacadas de los videos de fitness de los años 80. La oferta de clases grupales siempre se veía como un acompañamiento. El modelo del gimnasio tradicional se basaba en la sala de máquinas, ahí estaba el fuerte, y se acompañaba con estas clases, dónde veíamos a un entrenador guiando y motivando. Era algo así como una mezcla entre un entrenador y un cheerleader. Harto derroche de energía y actitud.
Avanzamos 20 años y el panorama cambió por completo. En esto creo bastante tuvo que ver el CrossFit, pero más allá de quien lo inició, la realidad es que hoy en día es común ver gimnasios de clases grupales. Apareció por todos lados el formato de boxes, ya no son exclusivamente de CrossFit, hoy en día encontramos este formato en variadas disciplinas y distintas mezclas. A esta corriente se han sumado el boxeo, las artes marciales y hoy en día nos encontramos con centros que viven principalmente de el formato de clases grupales. En lo que respecta al proyecto de Acción, hasta finales del 2017 el 95% de nuestra facturación era por clases grupales. Nuestra principal oferta estaba en tener muchas clases grupales, CrossFit en todos los horarios. También hemos visto como deportes individuales, como el levantamiento olímpico, se han llevado al formato de clases grupales. Con la fuerte irrupción de nuevos modelos de negocio en el mundo del fitness vemos como la adopción de clases grupales ya es parte de un "desde". Ya sean gimnasios tradicionales, boxes de CrossFit, estudios de artes marciales, gimnasios de boxeo, clínicas de kinesiología, cada vez más se unen a este formato.
Rápidamente analicemos los pro y los contra. Cuando pensamos en los "pro" el primero que se me viene a la cabeza es que te permite un precio competitivo con un buen margen, si logras llenar la clase. La formula de precio por cantidad se hace simple de entender. El alumno puede pagar menos y uno logra servir a más clientes, el nombre del juego es el volumen. Por otro lado tiene el componente social que es cada vez más relevante en nuestra sociedad. Las personas buscan y necesitan conectar, la clase grupal puede ser una buena excusa para que estas cosas pasen. La clase grupal abrió las puertas a muchos entrenadores a diversificar su oferta. Es otra alternativa para generar ingresos.
Cuando pensamos en los contra creo importante aterrizar las expectativas de este tipo de clases. Lamentablemente a medida que aumenta el volumen se pierde calidad del servicio, se pierde conexión. Por otro lado me toca ver constantemente entrenadores "quemados", por hacer muchas clases al día terminan entregando un pésimo servicio. El nivel de energía y atención que te requiere el entregar una buena clase grupal hace que sea muy complejo mantener el nivel de servicio. Esto hace que muchas veces sea muy complejo escalar el servicio. Otra característica, que puede se visto como algo positivo o negativo, es las pocas barreras de entrada que tienen estos formatos. Vemos que se toman las plazas y que pueden ser realizados prácticamente por "cualquiera". No es mi intención ningunear a nadie, pero la realidad es que en este formato es difícil discriminar para el usuario la calidad del servicio que recibe. Como que todo se enreda un poco en el grupo.
El último "contra" en el que me quiero detener es la saturación del mercado. Acá me voy a ir a un entretenido libro "The Blue Ocean Strategy". En general es un libro que tiene un concepto bien simple. Los mercados son como los oceanos, van desarrollándose y a medida que se van saturando se van volviendo sangrientos, se van poniendo rojos. Se van generando una sobre oferta y el mercado cae en una guerra de quien cobra más barato, cada nuevo actor empieza a entrar con un punto de precio menor. Como contrapunto a esto el libro habla de los Oceanos azules, aquellos que no están saturados y dónde encontramos valor y diferenciación. Acá encontramos nuevas categorías. No recuerdo si era en el libro, pero alguna vez escuché la explicación usando el mundo del sushi como ejemplo. En una primera instancia era novedad y era bastante caro. De a poco aumentó la oferta, salían cada vez más locales y los precios bajaban. Ahora nos encontramos ofertas de sushi por todos lados. En el ejemplo del sushi el Oceano azul podría ser el armar un sushi para perros. Usar el boom que tienen actualmente las mascotas y tratar de crear una nueva categoría, dónde puedas definir el precio sin la presión del mercado y con la tranquilidad de servir a un público en específico. (la idea es pésima pero imagino que se entiende el punto)
Creo que las clases grupales son una excelente alternativa para entrenar. En lo personal hago todas las semanas clases grupales. Entrené años solo, hoy en día me gusta la compañía de otros para entrenar. No obstante creo que, más que seguir ofreciendo la clase de musculación, la clase de GAP o la clase de Hyrox o la última cosa de moda tenemos que lograr evolucionar en la propuesta y ser capaces de diferenciarnos con el servicio que entregamos. ¿Cómo? Creo que esa es la pregunta que debemos lograr responder. El formato es bueno, pero no lo saturemos, no lo matemos con una guerra de precios.
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