Retomar la senda y encontrar el momentum

En variadas ocasiones he utilizado este espacio para escribir acerca de mi búsqueda por generar hábitos positivos en mi vida. La importancia que le entrego a las pequeñas decisiones diarias que logran acercarme a conseguir los objetivos que busco. Este diseño es evidentemente personal, pero existen ciertas tareas que son "genéricas" y pasan a ser de utilidad para todos los seres humanos, ya que más que conseguir un objetivo en particular buscan cuidar de mi persona para poder rendir de mejor manera.

Dentro de estos hábitos diarios de vida son varios los que puedo enumerar. No logro desarrollarlos todos siempre pero apunto a lograrlo cada día. He aprendido con el tiempo que reforzarlos y volver a comprometerme conmigo mismo cada cierto tiempo, es una batalla constante. Es inevitable fallar pero el secreto no está en la perfección sino que en la constancia del esfuerzo. El no dejar de intentarlo. Aunque cuesta tanto volver a partir.

Todo el periodo de pandemia y post pandemia ha sido un poco loco en este aspecto. Han sido un par de años de muchos cambios. De estar constantemente re ordenando la vida y de cierta forma volviendo a empezar. Pero lo lindo de todo esto es que siempre puedes volver a empezar y una vez que logramos "momentum" cada pequeña decisión comienza a tener sentido.

La definición de la palabra “momentum” originalmente hace referencia a un principio físico que define cierta cantidad de movimiento de un cuerpo. El principio establece que entre más momentum, más velocidad y mayor dificultad para detenerlo. Me quiero enfocar en esto último. Como a medida que vamos tomando velocidad es cada vez más difícil detenernos. Indudablemente la principal dificultad radica en comenzar a movernos. En partir. El inicio es duro y acá es dónde dependemos de nuestros motivadores, para lograr pasar esta difícil primera etapa. Pero una vez que lo consigues todo comienza a mejorar.

Esto lo veo cada día en nuestros alumnitos. Como veo aquellos que comienzan llenos de motivación y esperanza y cuan difícil es superar esos primeros días. Luchar cada día por no fallar. Por lograr mantener un hábito que en una primera instancia pareciera que estamos locos. Como duelen los primeros días de entrenamiento el subir una escalera o labores tan simples como ir al baño pueden terminar siendo de mucho esfuerzo. Acá es dónde nuestras motivaciones se ponen a prueba y debemos creer en el proceso y comprometernos con nuestros objetivos.

De cierta forma, estas líneas son una invitación a volverlo a intentar. A no darnos por vencidos y seguir comprometidos con nuestros objetivos. Cuesta mucho ponernos en movimiento hacia la dirección correcta, pero vale mucho la pena. La vida es una sumatoria de decisiones que nos permiten llevar a nuestra persona hacia la dirección que queremos. Tomar control de nuestra vida e identificar todo aquello que si podemos controlar y te permite llegar a tus objetivos es fundamental.

Por lo pronto les dejo un listado de mis hábitos, aquellos que siento hacen una diferencia, vivo constantemente tratando de retomarlos y cumplirlos. A veces lo logro, a veces me toca volver a empezar. Pero en algunas ocasiones voy tomando velocidad y me atrapa el momentum. Y es muy difícil detenerme....

1. Levantarme todos los días a la misma hora, despertar a las 5 AM. Higiene de sueño.
2. Acostarme todos los días a la misma hora. 22 horas. Higiene de sueño
3. Dormir 7 horas diarias, es importante para lograr un buen descanso.
4. Leer al menos 15 páginas de un libro antes de dormir. No dejar de aprender.
5. Alejarme del teléfono al menos 30 minutos antes de acostarme a dormir. Higiene de sueño.
6. Al menos 3 veces por semana entrenamiento de fuerza. Cuidar mi cuerpo.
7. Entrenar todos los días (moverme con intención). Cuidar mi cuerpo
8. 5 minutos de posición de sentadilla. Trabajar mi flexibilidad.
9. 12 minutos de meditación guiada todos los días. Calmar mi mente.
10. Escribir un artículo para el blog al menos una vez por semana. Expresar mis ideas.
11. Terminar el día destacando 5 cosas positivas de mi día. Destacar lo positivo.
12. Dar un beso a mis hijas todos los días al levantarme. Potenciar la emocionalidad.
13. Comer según mi pauta alimenticia, respetando mis requerimientos. Cuidar mi cuerpo.
14. Tomar al menos 2 litros de agua al día. Cuidar mi cuerpo.
15. No tomar cerveza. Cuidar mi cuerpo.
16. Alejarme de azúcar y comida procesadas. Cuidar mi cuerpo.

Cada uno de estos hábitos son parte de lo que trato de lograr cada día. Cada uno responde a mecanismos que me permiten funcionar mejor, vivir mejor y me acercan a conseguir mis objetivos. Cuando los escribo me parece una locura. No se como llegué a esto, pero tengo la plena convicción que cada uno de estos son fundamentales para lograr un equilibrio en mi vida. No creo en el azar. Creo en buscar aquello que podemos controlar y usarlo a nuestro favor.

Espero poder inspirar a más de alguno, pero no me extrañaría que más de alguno me criticara por vivir de esta forma. Sólo se que cuando logro de manera consistente cumplir con este listado mi vida comienza a funcionar mejor, me siento mejor y voy logrando alcanzar mis objetivos. Al final de eso se trata no? De encontrar nuestra forma de vivir la vida, la que a cada uno le funciona.

Yo seguiré tratando de cumplir con mis hábitos y espero lograr ese ansiado momentum, hasta que sea imposible detenerme.