Meet me half way
Siempre me ha gustado esa expresión en inglés. "Meet me half way", la frase se enfoca en mostrar la importancia de ambas partes de ceder para lograr un punto de encuentro. Cómo ese punto medio es el lugar que nos permite encontrar ese equilibrio. Pero hoy no quiero escribir de acuerdos, quiero hablar de puntos medios. La semana recién pasada cumplí 40 años y se generó en mi la sensación de que llegué a la mitad del camino, que es bastante probable de que haya llegado a la mitad de mi vida.
¿Qué significa esta mitad? o ¿Qué representa este hito en la vida de una persona?. Me he pasado los último días reflexionando al respecto y soy incapaz de llegar a una clara conclusión. Simplemente es un número más, es un punto más en la construcción de mi vida y el camino que he recorrido. No obstante es un buen momento para evaluar en dónde estamos, o lo que me parece más importante, ¿Cuánto hemos cambiado?
Para el Daniel de hace 20 años atrás su cumpleaños era un importante hito. Quería se "celebrado", quería sentir el cariño de muchos. Recuerdo incluso de más pequeño que me generaba mucha ansiedad celebrar mi cumpleaños. Me daba miedo de que nadie asistiera, sentirme solo. La aprobación del resto significaba mucho para ese Daniel que estaba recién comenzando a vivir. Después de todo este tiempo mi cumpleaños pasó a ser un día más. Ya no me preocupa quienes me saluden. Paso el tiempo con aquellos que quiero, independiente de el día que sea y trato de rodearme de las personas que son relevante para mi vida. No cultivo relaciones superficiales. No se trata de que la opinión del resto no me importe. Simplemente ya no es tan relevante, salvo aquellas personas las que tengo cerca y valoro mucho su opinión.
Muchas cosas han cambiado en estos 40 años y ciertamente estoy en un lugar que nunca imaginé. Nunca pensé en dedicarme a lo que hoy hago. Esto de dar clases de CrossFit, liderar un proyecto deportivo, trabajar en un Startup, ser padre de familia son cosas que realmente disfruto hacer pero que nunca me imaginé. La vida me fue mostrando cuan equivocado estaba de las cosas que creía que quería.
En estos 40 años siento que he aprendido a vivir en la incertidumbre, en despojarme de esa necesidad de certeza y aprender que parte de disfrutar el camino es no saber que viene por delante. El aprender que somos un proyecto en construcción y que gran parte de las proyecciones que trazamos para nuestras vidas no son más que ilusiones, que algunas lograremos concretar y otras no. Que simplemente no pasa nada cuando no llegamos a la meta porque no existe tal cosa como una meta. Sólo avanzamos día a día y que debiésemos buscar ser mejores, en lo que sea que nos importe a nosotros. No vivir por el resto, vivir para uno para poder disfrutar junto a los que queremos y nos importan. La necesidad de estabilidad, de certeza y comodidad son sentimientos que a mis 40 años ya no veo necesarios, los dejé atrás, ya no los añoro. Los siento innecesarios para la vida que elijo vivir.
Miro estos 40 años y no puedo más que sentirme afortunado y siento que ese es mi regalo de cumpleaños. Tengo una maravillosa familia y un par de niñas que crecen sanas y felices cada día. Son mi mayor orgullo y me generan una felicidad que me desborda cada día. Tengo la suerte de dedicar mi día a día a algo que amo y siento una fuerte conexión con un propósito, que no todos entienden, pero que lo siento mío y que no paro de luchar por esto. Tengo la fortuna de compartir mi vida con una increíble mujer, con la que ya llevo 20 años creciendo y formando una familia, nuestra familia.
Vivo feliz y con todo cada día. Hago lo que creo que está bien y me cuestiono cada paso. Creo que la incertidumbre es parte del camino y que también hace de todo esto un gran desafío. Me encanta partir lleno de energía y ganas de cambiar el mundo, de ayudar a personas y tratar de cambiar vidas. No se que me espera estos próximos 40 años, puede que sean más o puede que sean menos. Sólo se que trataré de disfrutar cada día junto a los que quiero y seguiré coleccionando experiencias que me irán cambiando.
Feliz Cumpleaños a mi! Vamos por los siguientes 40 años, venga lo que venga
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