Pre Juicio

Prejuicio

Opinión preconcebida, generalmente negativa, hacia algo o alguien. 

Nuestra mente funciona de esta forma. Va creando una realidad y en base a nuestras experiencias, en base a la información que recopilamos va generando juicios anticipados. Por lo general negativos, que buscan "protegernos". Lo escribo entre comillas porque la lógica proteccionista del prejuicio no tengo claro si aplica tanto en nuestro día a día. Imagino un mundo desconocido, cuando, por ejemplo nos enfrentábamos por primera vez a una araña. Este animal desconocido nos generaba un aprendizaje que probablemente luego usaríamos como un prejuicio. Las arañas son peligrosas. ¿Es cierto que todas las arañas son peligrosas? No, la gran mayoría no es mortal y menos peligrosa, pero en nuestro biblioteca de información queda establecida una alerta y el próximo encuentro preferimos evitar a estos pequeños. Ahora, es muy probable de que uno no interactuara nunca con una araña, no obstante tenemos el prejuicio de que son peligrosas. Es lo lindo de no vivir aislado, compartimos información que va siendo parte de nuestra realidad y generamos prejuicios colectivos.

Acá las cosas se ponen un poco más complicada. Ya que hoy en día vivimos en un mundo de exceso de información, lo que nos va llenando de prejuicios que debemos ser muy cuidadosos de incorporar. Por otro lado tenemos las RRSS, que están diseñadas para confirmar nuestros prejuicios. Las RRSS trabajan con algoritmos que nos muestran la información que queremos encontrar, que se conecta con nosotros, por lo que genera un sesgo constante de la realidad. Nos lleva a muchas veces confirmar nuestras creencias en base a "la cantidad" de información que confirma lo que pensamos. El problema es que esa cantidad de información que confirma nuestro prejuicio no viene de una reflexión, viene exactamente desde el mismo lugar desde dónde nació el prejuicio. Esto nos lleva a perpetuar estos prejuicios, que muchas veces nacen de la falta de información o simplemente desde la falta de profundidad de la información.

Es importante que seamos capaces de identificar el error de diseño, que nos hace equivocarnos constantemente o simplemente nos lleva a realizar juicios adelantados de cosas o situaciones que en realidad no conocemos. Cuando leemos una información que confirma lo que creemos debemos ser lo suficientemente reflexivos para cuestionarla. Cuando alguien nos alienta y confirma de que estamos en lo correcto debemos cuestionarnos realmente si es así. Ojo que esto no se trata de cuestionar aquello de lo que no estamos de acuerdo, que de eso abunda en la actualidad. Todos los días las RRSS se llenan de personajes que juzgan desde sus pedestales de la moralidad a otros, rápidos para apuntar con el dedo, pero incapaces de hacerse cargo de sus propios errores de diseño. Me refiero a cuestionar aquello que creemos real, a cuestionar nuestros prejuicios. A profundizar más allá de la información que poseemos buscando entender desde dónde nace ese prejuicio, como llegamos a incorporarlo y que cabe la posibilidad de que estemos equivocados.

Ahora me interesa aclarar que no digo esto desde una posición de superioridad moral. No trato de de mostrar las fallas de otros, todo lo contrario, me reconozco lleno de prejuicios e información incompleta. En estas líneas escribo acerca de lo que considero mis errores, desde la experiencia de encontrarme constantemente equivocado. Trato de reflexionar respecto a mis convicciones y trato de liberarme de las verdades absolutas. Asumo que todo aquello en lo que creo puede estar equivocado y busco cuestionarlo. Pero por sobre todo, trato de evitar juzgar a otros y uso esa energía en juzgarme a mi mismo, cuestionar lo que yo creo.

El prejuicio debe venir acompañado de un juicio, una reflexión y una conclusión, al menos preliminar, pero el mundo de la inmediatez pareciera que nos ha quitado la capacidad de hacer el circuito completo. Hoy pasamos del prejuicio a la sentencia y dejamos de lado la parte más importante del proceso, la reflexión, aquella que nos entrega el mayor valor y que nos permite crecer como seres humanos. Al final, de eso se trata ¿o no?