Mi Responsabilidad

Debo haber tenido unos 7-8 años. Recuerdo acostarme a dormir y despertar al poco rato. No podía dormir. Tenía una prueba al día siguiente y no había estudiado. ¿Los motivos? La verdad no lo recuerdo. Probablemente me la pasé jugando toda la tarde y el tiempo se pasó. Lo único que recuerdo, de manera vívida, es que me levanté de mi cama, fui a la cama de mi mamá a contarle que no había estudiado y llorando le reconocí que no había hecho lo que debía hacer. No recuerdo mucho más de ese día. A estas alturas no se si me puse a estudiar, si mi madre me consoló (probablemente así fue) o si me calmé y me fui a dormir. Pero esa sensación, la de no cumplir con mi responsabilidad es algo que me acompaña hasta el día de hoy y en estos momentos se hace más latente.

En Marzo del 2020 mucho de mi vida cambió o al menos el enfoque de esta cambió. Pasé de levantarme todos los días a construir mis sueños a sufrir cada día en mantener vivos mis sueños. Gran parte de mis planes se derrumbaron y tuve que aprender a convivir con esta nueva realidad, con estas nuevas sensaciones. Que pasado más de un año todavía no logro conciliar.

El sentido de la responsabilidad sigue ahí, molestando día a día y no me deja tranquilo. Son tantos los problemas que acumulo, son tantas cosas que no he podido cumplir desde Marzo del 2020 que ya perdí el orden de las cosas. Voy atacando un problema a la vez, lamentablemente veo como revienta cada problema y busco tratar de hacerme cargo con lo que queda de fuerzas y recursos. Es difícil y nunca imaginé tener que enfrentar algo como esto. Me encantaría decir que fue un proceso ordenado, que fue de apoco apareciendo un problema, luego otro, hasta el punto dónde estamos. Pero lo cierto es que el punto de inflexión se genera en Marzo y de ahí en más todo ha sido ver como se derrumba, como me derrumbo.

Juicios laborales, llamadas constantes de los bancos, sumarios sanitarios, la inspección del trabajo, deudas con clientes y eso es sólo el inicio de una semana normal. A eso se suman las dificultades constantes para trabajar. Cada día se acumula un nuevo problema que es acrecentado por autoridades incompetentes que tratan de "cuidarnos" Sigo día a día luchando una batalla que pareciera no tiene ningún sentido cuando muchos quieren derribarte. Cuando tantos quieren verte caer.

Aquí es dónde me cuestiono un poco el sentido de la responsabilidad. Porque no siento que todo esto sea mi responsabilidad. Hace más de un año que se me persigue y se me prohíbe trabajar. Hace más de un año que se me amarró de manos y se me prohibió cumplir con mis responsabilidades. Si, porque al momento que me prohíbes trabajar, el momento en que me defines como inútil  me excluyes del sistema y no me dejas ser participe de este. ¿Cómo puedo entonces cumplir con mi responsabilidad si me prohíbes hacer aquello que me permite cumplir con esta?

Es irónico a lo menos como el estado me da un bono y al mismo tiempo me pasa una multa. Es irónico como el Banco me llama para renegociar un crédito (dónde pago intereses sobre intereses) y el estado me cobra un impuesto por renegociar. El mismo estado que no me deja trabajar me pasa la cuenta por no cumplir mis responsabilidades, responsabilidades que hace rato no puedo cumplir por su culpa.

El sentido de la responsabilidad sigue ahí, ese no logro que se vaya. Pero hace rato que me liberé de la culpa. Ya hice las paces con ese niño que frente su sentido de la responsabilidad llora o se siente perdido. Hoy soy capaz de aceptar mis errores, aprender de estos y seguir adelante, pese a la adversidad,, La batalla continúa. 

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