Diferentes aristas de un mismo problema

Día Viernes, último día de funcionamiento y nos preparamos para un nuevo cierre, a estas alturas vamos por el cuarto cierre en un año 3 meses. En esta ocasión enfrentamos el desafío luego de 5 semanas de operación, a través de 5 semanas trabajamos incansablemente para ir poniéndonos de pie hasta que recibimos nuevamente el golpe, el que podría ser el último. Ya simplemente no lo sabemos. 

Termina la clase y se acerca a conversar conmigo una alumna. Me pregunta si le puedo vender un café. Se genera una conversación casual, me empieza a contar que puede tomar como mucho un café al día, porque tiene hipertensión. Le pregunto hace cuanto tiempo entrena con nosotros. Ella fue parte de Acción XL, que comenzó en Noviembre del 2019. Ella había postulado decidida a cambiar su vida y fue una de las seleccionadas en el programa (regalábamos 9 meses de entrenamiento a personas con sobrepeso/obesidad que quisieran cambiar su hábitos) , Estuvo hasta Marzo '20 entrenando en Acción Providencia. Después de esa fecha dejó de entrenar por la pandemia y no logró seguir en casa. Lamentablemente me comentó que a sus problemas de salud por el peso se sumó una depresión. Que habían sido momentos muy difíciles. Estaba feliz de que hubiésemos abierto nuestras puertas. De que siguiéramos luchando. Pero también estaba muy desesperanzada de tener que volver a encerrarse. Me comentó que había arreglado su bicicleta y que pretendía aprovechar la franja para salir a hacer actividad física.

Así como ella son muchos los que se han visto afectados en su salud por las medidas de confinamiento. Lamentablemente se dejó en segundo plano los efectos adversos a la salud de las personas que ha significado el estar encerrados, la privación de libertad (suena como prisión) a la que nos hemos visto enfrentados a traído consecuencias que han sido continuamente miradas en menos.

Me apena tanto el que se siga entendiendo la salud de las personas como una sola dimensión .Que no se logre entender que somos más que sólo órganos y funciones. Que nuestras emociones, que nuestros hábitos y que nuestras interacciones tienen directa relación con nuestra salud. Una persona con depresión tiene un sistema inmune deprimido (valga la redundancia). Una persona sedentaria tiene su sistema inmune comprometido. Este es el punto dónde puedo ponerme a enumerar la larga lista de cosas que afectan nuestra salud. Pero aún así seguimos insistiendo que ponerse una mascarilla y no salir de casa es "cuidarse". No y no, cuidarse es preocuparte de tu salud, como un todo. Tiene que ver con comer de manera balanceada, entendiendo que tu cuerpo necesita energía y nutrientes. Tiene más que ver con preocuparse de los hábitos e higiene de sueño y que no es algo para dejar al azar (ni que se arregle con miles de pastillas). Tiene mucho más que ver con realizar actividad física, no esa que se hace obligado, sino esa que es intensa y que nos saca una sonrisa cuando terminamos. Entender que cultivar nuestras emociones y nuestras relaciones humanas no hace bien, nos mantiene bien. Evitar aquello que nos daña y daña al entorno.

Es tanta la impotencia que siento de todo esto. Mientras tanto seguimos luchando, seguimos firmemente protegiendo el espacio que hemos creado para ayudar a las personas a cuidar de su salud. El gobierno publica y publica medidas y protocolos ESTUPIDOS, 100% desconectados con la realidad. Nosotros agarramos esas migajas y tratamos de levantar este proyecto una vez más. ¿Llegará el momento que entiendan que lo hacemos por la salud?